Los intercambios de saberes son de gran importancia para el crecimiento personal de nuestras asociadas, ya que motivan y potencian las habilidades tanto de ser madres, esposas, hijas, y también de productoras, es por eso que a través de las capacitaciones se buscan personas generadoras de cambios; como lo es Luz Mari Bartolo, quien a través de su cocina tradicional fomenta los sabores que se han perdido, esto lo hace por medio de su restaurante que es el resultado de trabajo, esfuerzo y la constancia.
La experiencia de Luz Mari es un estímulo y ejemplo para las asociadas; ella fomenta la recuperación de saberes tradicionales complementándolos con un poco de innovación, para que su acogida sea mayor; con esto las asociadas logran fomentar la economía social y el fortalecimiento de la soberanía alimentaria.
Testimonio Luz Mary Bartolo
LA SOBERANÍA ALIMENTARIA.
Vista desde el punto de vista de los custodios, guardianes, protectores, salvaguardas y algunos nombres más consideramos que es importante en el d esarrollo sostenible de las especies vegetales y animales y sobre todo la humana. Hoy estamos llamados a la conservación, preservación y sobre todo a la trasformación de las semillas en alimento.
Ser guardián de semillas implica una responsabilidad y compromiso con las generaciones presentes y futuras. Las practicas ancestrales de siembra, cuidado, recolección y preservación de las semillas nos dan garantía de continuidad.
Tenemos muchos riesgos a la hora de sembrar las chagras ya que la amenaza de los químicos, plaguicidas, herbicidas y aún peor las semillas transgénicas que terminan contaminando nuestras semillas naturales.
Hoy el llamado es a empezar procesos reales en las entidades, organizaciones, constituciones, ONGS, para lograr una buena difusión y visibilización de la lucha que los hombres y mujeres damos desde los territorios por la conservación de nuestras semillas, empoderar a nuestras familias indígenas, campesinas y todo aquel que crea que esta lucha es necesaria darla.
experiencia de las caficultoras
Con el fin de di ver sificar las unidades producti vas de las familias asociadas; la asociación brinda apoyo y acompañamiento, que comienza con una fase donde se identifican las dificultades; luego pasan a capacitación para que adquieran conceptos técnicos y amplíen sus conocimientos, en temas como procesos de organización, producción sostenible, aprovechamiento con valor agregado, entre otros.
Lle van do a la práctica todo el conocimiento, viene la fase de implementación; otorgamiento de créditos y entrega de material e insumos con los de que se trabajara. Todo este proceso cuenta con la evaluación y seguimiento donde se muestra la experiencia de cada integrante de proyecto.
ASPROCAFÉ INGRUMÁ realizó una reunión en la cual se integro a la familia de las asociadas, integrantes del programa mujer; en este encuentro se realizaron diferentes actividades, con un fin en común, recalcar los valores que deben tener y hacer visibles en la asociación.
Con dinámicas, exposiciones y entre sonrisas pasaron una mañana amena y aprendieron más sobre valores y como aplicarlos en el diario vivir.
Marlen Yulieth Becerra Rojas es una joven de la vereda de San Lorenzo (corregimiento de Riosucio-Caldas) quien esta en el proceso de relevo generacional, apoyando a sus padres en las cosechas, sin abandonar los bellos rincones del campo.
La familia de Marlen integran el grupo de caficultores orgánicos de ASPROCAFÉ INGRUMÁ, contribuyen al buen manejo del medio ambiente, y han sido beneficiados por programas tales como: Programa Mujer, certificación orgánica, útiles escolares entre otros.
En este vídeo nos cuenta más sobre su experiencia y amor al campo.
PROYECTO CON JÓVENES DEL PROGRAMA DE PRODUCCIÓN ORGÁNICA
El proyecto busca fomentar actividades productivas en jóvenes emprendedores en especial las relacionadas con la agricultura orgánica; por medio de un fondo rotatorio de microcréditos que además de iniciar y/o continuar sus proyectos, es una oportunidad de aprendizaje e interacción con otros jóvenes.
Aportar a los proyectos de vida de cada joven productor, sin olvidar que desde lo profesional se puede construir futuro para el territorio, y el desarrollo de la agricultura como fuente principal de la economía de un país.
Que permanezca la conexión con el territorio visto éste como un todo, la familia, los amigos, la cultura, las tradiciones, los recursos naturales y los cultivos que los vieron crecer.